- ¿Sabes que me apetece?
- No.
- Comerle la Boca, deslizarme por su Lengua y jugar al "Corre-que-te-pillo" entre los Lunares de su Piel...
- Y... ¿A qué esperas?
- A que el Sol se esconda y los Hijos De La Noche podamos encontrarnos bajos las Estrellas...
- Un segundo... ¿Qué eres?
- ¿Que qué soy?
- Sí... ¿Qué eres? ¿Quién eres?
- Soy un Vampiro.
- Emm... ¿No jodas? Estás de coña... ¿Verdad? ¿Dónde está la cámara oculta?
- No. No jodo. No. No estoy de coña. No. No hay cámara oculta. No. Nunca bromeo con la comida.
- What?
- Tú serás nuestra Cena, colega... No debiste entrar Anoche en "La Nevera Sangrienta"... Todo el Mundo sabe que es un Antro de Perversión... Un Garito de Mala Muerte... Pero...
- ¿Pero?
- Pero... ¡Lo hiciste! ¡Y no hay Nada que me guste más que la Sangre aliñada con Absenta!
Ummm menuda historia. Te has metido en el sitio equivocado.
ResponderEliminarUn besillo guapa.
¡Sep! ¡¡Hay Lugares que son muuuuuuuuuuuuu peligrosos!! #SeSabe
Eliminar¡¡Muchos Besitineeeeees!! *-*
Me ha gustado mucho Campanilla! No debió entrar en la nevera sangrienta, un antro de perversión... jeje. Un fuerte abrazo! ; )
ResponderEliminarSiendo como soy súper fan de True Blood, (qué pena que terminara)
ResponderEliminar¡Me ha encantado! ;)
Ya nos has avisado, no deberíamos haber entrado en tu neverita sangrienta, ahora querremos y necesitaremos que nos alimentes con más letras.
Besos.