“¡Oh! ¡Señora mía! ¡Oh! ¡Madre mía! Yo me ofrezco
enteramente a ti y, en prueba de mi afecto en este día, te consagro mis Ojos,
mis Oídos, mi Lengua, mi Corazón… Ya que soy todo tuyo… ¡Oh! ¡Madre de Bondad!
Guárdame y defiéndeme como pertenencia y posesión tuya.”
Las Palabras surgieron de la Boca del Elegido y, ante el
regocijo de los Presentes, despertaron a la Deidad que dormía en el Sepulcro de
Piedra. Muy lentamente, la más Hermosa de las Mujeres posó sus delicados dedos
sobre el borde del que había sido su lecho y, con una elegancia sobrenatural,
se levantó.
- Estos son mi Ojos, con ellos veré el Mundo. Estos... Mis
Oídos, con los que os escucharé. Mi Lengua... Dictará Sentencia, será Juez y
Verdugo. Mi Corazón...
Ciego, sordo, mudo y sin Alma, el Elegido había cumplido su
Misión. Había entregado su Vida. El Ritual finalizaba en el Sagrado Monte Da Madalena.
Sin embargo, los Hijos de María, habían errado en su Conexión con los Cielos y,
aprovechando la brecha abierta en el Sendero de los Muertos, una Meiga emergió
de las Profundidades para extender el Caos a toda la Humanidad.
A Lavandeira Da Noite, la más peligrosa de todas ellas,
había regresado de su largo Letargo.
Ummmm menuda leyenda llena de magia. Las meigas, llenas de misterio, como me gusta.
ResponderEliminarNo sé si está basado en alguna leyenda del norte.
Un besillo.
¡¡Guapitiiiii!! Respondo con muchoooos meses de retaraso ;((((
Eliminar¡Yes! A Lavandeira Da Noite es una Meiga conocida por miñas Terras Galegas... Yo solo le he dado una vuelta de tuerca a la Historia *-*
¡¡Mil Besinnnnesssssssss!! ^^
Qué bueno Campanilla, y así es, el corazón para nuestra desgracia una vez entregado es ciego, sordo y mudo.
ResponderEliminarMe encantó! :)
Besos.
El Corazón se entrega... Se entregan los Ojos, los Oídos y la Lengua... Y, cuando nos queremos dar cuenta, se nos fue el Alma... ¡Así se despiertan a las Meigas! ;P
Eliminar¡¡Besitos Enormesssss!!